El Museo Muñoz Sola de Arte Moderno en Tudela, Navarra, se viste de gala para recibir una obra excepcional: «La Inmaculada Concepción» de Francisco de Zurbarán, perpetuando así la colaboración entre el Museo del Prado y Telefónica en el marco del proyecto «El arte que conecta». Esta iniciativa busca acercar el arte de renombrados pintores al público general, permitiendo que obras maestras recorran diferentes ciudades de España.
La pieza, que formará parte de la exhibición hasta el próximo 17 de noviembre, es una representación única dentro de la conocida donación Arango. A diferencia de otras obras de la misma temática, en esta versión la figura de la Inmaculada se muestra con los brazos extendidos y la mirada fija en el cielo, creando un dinamismo visual poco habitual en las representaciones de la Inmaculada de la época de Zurbarán. Este gesto, junto al elegante giro del cuerpo de la figura, ofrece una interpretación anticipada que influenciaría trabajos posteriores de artistas como Bartolomé Esteban Murillo.
Desde un enfoque cromático, Zurbarán también se distingue en esta obra por el uso preciso de colores. El blanco de la túnica, el azul del manto y el dorado del entorno son manipulados con maestría, generando una composición espacial que resalta el volumen a través de pliegues ingeniosamente dispuestos. Este tratamiento de color y forma es un desvío notorio del estatismo que caracteriza a la escuela sevillana de su tiempo.
El proyecto «El arte que conecta» no solo sugiere una experiencia artística enriquecedora, sino que también simboliza la celebración del centenario de Telefónica, haciendo eco de la estrategia del Museo del Prado de extender su influencia más allá de su sede en Madrid. En el pasado, «De Gira por España» llevó selectas obras maestras a cerca de cuarenta ciudades, mientras que «El Prado en las calles» sigue exhibiendo reproducciones fotográficas en varias localidades andaluzas, después de un exitoso recorrido por otras comunidades autónomas.
Este esfuerzo conjunto de Telefónica y el Museo del Prado reafirma su compromiso con la difusión cultural, acercando el arte clásico y su historia a nuevos públicos por todo el territorio español, priorizando así el acceso universal a la belleza y el conocimiento que reside en sus colecciones.
