En 2023, se revelaron nuevas cifras sobre la participación de los niños en el cuidado infantil y la educación formal en la Unión Europea, destacando diferencias significativas en el acceso a estos servicios. Según los datos, el 21,1% de los niños de entre 3 años y la edad mínima de escolarización obligatoria participaron en estos servicios por 24 horas semanales o menos, mientras que un notable 68,0% lo hicieron por al menos 25 horas semanales. Estas cifras reflejan variaciones en el acceso a la educación y cuidado formal para los menores en la región.
Un análisis más profundo de los niños en riesgo de pobreza o exclusión social, conocidos estadísticamente bajo la categoría AROPE, revela que el 16,8% de estos niños no participaron en ningún tipo de cuidado infantil o educación formal. Esta cifra contrasta con el 9,0% de los niños no considerados en situación de riesgo. Además, quienes pertenecen al grupo AROPE mostraron menos probabilidades (58,7%) de recibir estos servicios durante 25 horas o más a la semana, frente al 71,0% de sus contrapartes no vulnerables.
Por otro lado, los menores en riesgo de exclusión social exhibieron una mayor tendencia (24,5%) a recibir cuidado o educación formal por periodos de 1 a 24 horas semanales, en comparación con el 20,0% de los niños no enfrentados a esta vulnerabilidad.
Las estadísticas resaltan la desigualdad en el acceso a servicios clave de cuidado y educación, esenciales para el desarrollo infantil temprano. Estos datos instan a la reflexión sobre la urgencia de implementar políticas públicas que promuevan una participación igualitaria para todos los niños, sin importar su contexto socioeconómico, con el objetivo de cerrar las brechas y fomentar la igualdad de oportunidades desde la primera infancia.