El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha decidido dar un paso significativo hacia la mejora de la eficiencia energética en las infraestructuras viales de Valencia, a través de la licitación de dos contratos que suman un total de 17 millones de euros. Esta inversión está dirigida a la modernización de la iluminación a lo largo de 24 kilómetros de las autovías V-31, A-3 y A-7, destacándose la instalación de 2.300 luminarias LED, reconocidas por su bajo consumo de energía y su durabilidad.
El primer contrato, que asciende a 13,58 millones de euros, se enfocará en la autovía V-31, cubriendo un recorrido de 13 kilómetros desde su inicio en el enlace con la A-7 hasta el kilómetro 13, donde conecta con la V-30. Esta intervención va a impactar en varios municipios, como Silla, Beniparrell, Albal, Catarroja, Massanassa, Alfafar, Sedaví y Valencia. Se plantea la instalación de nuevas luminarias de manera bilateral en el tronco principal de la autovía, mientras que los ramales recibirán el diseño unilateral. Además, se buscará la preservación de los báculos existentes siempre que sea posible, complementando esta tarea con obras civiles que incluirán la creación de nuevas canalizaciones.
El segundo contrato, con un valor de 3,47 millones de euros, se destina a la autovía A-3 y contempla la instalación de más de 1.000 luminarias LED en los tramos que cruzan Riba-roja de Túria y Quart de Poblet, específicamente entre los kilómetros 338,100 y 348,200. Este proyecto permitirá sustituir las luminarias de vapor de sodio por tecnología LED, incrementando así la eficiencia energética en estas vías.
Estas acciones son parte del Plan de Eficiencia Energética de la Dirección General de Carreteras, donde se ha procurado un balance entre la innovación tecnológica y la sostenibilidad, intentando mantener, en la medida de lo posible, las infraestructuras existentes. También se implementará un nuevo sistema de control del alumbrado inteligente, que prometerá una gestión más eficiente de los recursos, lo que se traducirá en una significativa disminución de costos y del consumo energético.
Dicha iniciativa está alineada con los compromisos establecidos con la Comisión Europea, en el contexto del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, evidenciando la intención del Gobierno de modernizar y hacer más sostenibles las infraestructuras de transporte en España.