Reubicación Estratégica del Personal No Crítico de la ONU en Kivu Norte, República Democrática del Congo

María MR

La ONU ha iniciado desde este sábado la reubicación temporal de su personal no esencial en Goma, República Democrática del Congo, debido al creciente deterioro de la seguridad en la región. Esta acción se produce en un contexto de preocupación ante las hostilidades del grupo armado no estatal M23, que recibe apoyo de Ruanda y se enfrenta al Gobierno congoleño.

La misión de la ONU en el país, conocida como MONUSCO, está trasladando a su personal administrativo y otros colaboradores que pueden continuar sus actividades desde ubicaciones distintas a Kivu Norte. Este plan busca garantizar la seguridad del personal de la ONU mientras se preservan las operaciones críticas de la organización en la zona.

La MONUSCO ha reafirmado su compromiso de proporcionar asistencia humanitaria y proteger a la población civil, a pesar de la reubicación. Históricamente, Kivu Norte ha sido escenario de resurgimientos frecuentes de grupos armados, y recientemente se ha intensificado el enfrentamiento entre el M23 y las fuerzas gubernamentales.

Los informes indican que la violencia ha escalado notablemente, con incidentes alarmantes, como el asesinato del gobernador militar de Kivu Norte por parte de combatientes del M23 durante una inspección en la frontera. Este conflicto ha llevado al desplazamiento de alrededor de 400,000 personas en Kivu Norte y Kivu Sur desde inicios de este año, según datos de la ONU.

Abdoulaye Barry, jefe de la oficina de la ONU en Goma, expresó en una entrevista que la situación se vuelve cada vez más insegura tanto para los civiles como para los equipos de ayuda. A pesar de la reubicación del personal no esencial, los trabajadores críticos de la ONU continúan en el terreno, realizando operaciones indispensables que incluyen la distribución de alimentos y asistencia médica, y colaboran con socios humanitarios y autoridades locales para garantizar que la ayuda llegue a quienes más la necesitan.

La ONU llevará a cabo una evaluación continua de la situación de seguridad para determinar cuándo podrá restablecer completamente la presencia del personal que ha sido desplazado. En este contexto, el Secretario General de la ONU, António Guterres, ha hecho un llamado urgente para poner fin a los enfrentamientos en la región, subrayando el devastador costo del conflicto para los ciudadanos congoleños y para la estabilidad de toda la región.