La reciente crisis energética en España, marcada por un apagón histórico, ha impulsado la demanda de viviendas autosuficientes, desconectadas de la red eléctrica. Un ejemplo destacado de esta tendencia es el trabajo de Grupo Index, que ha demostrado la eficacia de sus viviendas energéticamente independientes, equipadas con placas solares, baterías de almacenamiento y sistemas de geotermia. Estas casas no solo producen su propia energía, sino que también permiten a sus propietarios autogestionarse y evitar problemas asociados con cortes de suministro.
Desde el apagón del 28 de abril, el interés por estas ‘casas desenchufadas’ ha crecido de manera notable, sobre todo entre quienes buscan viviendas unifamiliares. Esta situación se ha visto favorecida por la creciente incertidumbre en el mercado energético y la inflación, que han disparado los costos de electricidad y gas. Según la promotora, los hogares buscan cada vez más opciones que ofrezcan un ahorro energético real y eliminen las facturas de servicios públicos, lo que resulta especialmente atractivo en el actual contexto económico.
Sin embargo, la oferta de viviendas desconectadas de la red sigue siendo limitada, lo que genera un desajuste en el mercado inmobiliario, afectando especialmente a los chalets unifamiliares. Grupo Index ha notado un aumento significativo en las consultas sobre la instalación de sistemas sostenibles, incluyendo placas solares y calefacción eficiente.
Actualmente, la empresa dispone de tres promociones de ‘Casa Desenchufada’ en localidades como Las Rozas, Cubas de la Sagra y Puerta de Hierro en Madrid. Este desarrollo es una manifestación de cómo la construcción está evolucionando hacia modelos más sostenibles y autónomos, respondendo a la demanda de seguridad energética.
La experiencia del apagón ha evidenciado la vulnerabilidad del sistema eléctrico y propiciado un cambio de mentalidad en las opciones habitacionales. Empresas como Grupo Index, en contraste con grandes desarrolladoras que siguen apostando por proyectos tradicionales, están incorporando tecnologías renovables para adaptarse a las necesidades energéticas del futuro.