En 2023, el Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles (LACSD) se vio involucrado en un escándalo por el abuso de bases de datos sensibles de justicia penal, llevando a cabo búsquedas no autorizadas para realizar verificaciones de antecedentes relacionadas con permisos de porte oculto de armas de fuego. Este comportamiento ilegal contribuyó significativamente a las 7,275 violaciones registradas en todo el estado de California, con 6,789 de esas denuncias atribuibles al LACSD, lo que pone de manifiesto un alarmante nivel de incumplimiento en la gestión de información crítica.
Las investigaciones revelan múltiples casos de uso indebido de estas bases de datos, que van más allá de las verificaciones de antecedentes, incluyendo el acceso a información personal con fines de venganza por parte de algunos oficiales. A pesar de que muchas de las sanciones impuestas por estas violaciones consistieron en reentrenamientos, 24 oficiales fueron suspendidos, seis renunciaron y nueve fueron despedidos en toda California debido a estos incidentes.
El acceso a la base de datos de telecomunicaciones para la aplicación de la ley en California (CLETS) proporciona a los oficiales información sobre varios registros, incluyendo aquellos del Departamento de Vehículos Motorizados y el Sistema Nacional de Telecomunicaciones para la Aplicación de la Ley. Las agencias de seguridad que utilizan CLETS tienen la obligación de informar al Departamento de Justicia estatal sobre cualquier investigación o acción disciplinaria relacionada con el uso indebido del sistema, con el fin de fomentar la transparencia y el control en el uso de datos sensibles.
El mal uso de esta base de datos puede manifestarse de diversas maneras, desde compartir contraseñas hasta la consulta de información sobre parejas o celebridades. En años anteriores, se consideró inadecuado el uso de CLETS para la «aplicación de la ley de inmigración», alineándose con la normativa californiana sobre el uso ético de datos. Entre 2019 y 2023, se llevaron a cabo 761 investigaciones sobre el uso indebido de CLETS, resultando en más de 7,635 violaciones de las normas, que incluyen 55 suspensiones y 42 despidos.
Los informes también revelan que el abuso de datos por parte del LACSD para investigar permisos de porte oculto se prohibía explícitamente. A pesar de la implementación de nuevos procesos y reentrenamientos, las autoridades estatales han reconocido que este problema no es exclusivo de Los Ángeles, ya que otras agencias también han cometido violaciones similares.
La falta de supervisión de otros sistemas de información utilizados por la policía, como los lectores automáticos de matrículas y las bases de datos de reconocimiento facial, sugiere que el nivel de abuso podría ser aún mayor, ya que no están sometidos al mismo escrutinio que CLETS. Con la presentación de los informes de abusos de 2024 en camino, se espera que las estadísticas reflejen un panorama preocupante en torno a la ética y la transparencia en las prácticas policiales en California.