Advertencia de Guterres: La Solución de los Dos Estados en Peligro de Extinción

María MR

El Secretario General de la ONU, António Guterres, advirtió este martes ante el Consejo de Seguridad que la posibilidad de una solución basada en dos Estados entre Israel y Palestina enfrenta un grave riesgo de desvanecerse. En su intervención sobre la situación en Oriente Medio, Guterres subrayó que el compromiso político hacia este objetivo fundamental está más distante que nunca.

El Secretario General destacó que, a pesar de los cambios recientes en la región, caracterizados por un aumento de la violencia y la inestabilidad, los ciudadanos claman por un futuro libre de conflictos. Para lograr una paz duradera, es esencial alcanzar un acuerdo que permita a israelíes y palestinos vivir en armonía y seguridad, con Jerusalén como capital compartida.

El conflicto ha deteriorado los derechos fundamentales de ambas comunidades a vivir en seguridad, particularmente en Gaza, donde las condiciones de vida han alcanzado niveles inhumanos, dejando a su población en una situación crítica. Guterres considera que Gaza es un componente vital de un futuro Estado palestino, y cualquier modificación territorial en la región va en contra del derecho internacional.

En Cisjordania, las operaciones militares israelíes y la expansión de asentamientos están alterando las dinámicas geográficas y demográficas de manera alarmante, mientras que las agresiones de colonos aumentan sin que se produzca una respuesta adecuada. A su vez, Hamás sigue lanzando cohetes hacia Israel, lo que intensifica aún más la tensión en el área.

A pesar de un reciente alto el fuego que había ofrecido cierta esperanza al facilitar la liberación de algunos rehenes y la entrega de ayuda humanitaria, el aumento de los ataques israelíes ha resultado en la muerte de casi 2,000 palestinos, incluidos niños y trabajadores humanitarios. Esto ha transformado la crisis humanitaria en Gaza en un escenario insostenible.

Guterres hizo un llamado urgente para restablecer la entrada de ayuda humanitaria, garantizar la seguridad del personal de la ONU y liberar incondicionalmente a todos los rehenes, así como establecer un alto el fuego definitivo. También instó a la comunidad internacional a actuar de manera diligente para evitar la perpetuación de la ocupación y la violencia, enfatizando que la solución de dos Estados no debe perderse.

El Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU, Volker Türk, hizo eco de estas preocupaciones, subrayando la necesidad de impedir el colapso de la asistencia en Gaza y exigir justicia para aquellos responsables de violaciones a los derechos humanos. Türk expresó su inquietud por un plan israelí que podría obligar a los palestinos a trasladarse a una nueva «zona humanitaria», lo que pondría en riesgo a quienes no pueden desplazarse.

La situación en Gaza se complica aún más con la escasez de alimentos y combustible, llevando a la población a afrontar una crisis humanitaria sin precedentes. Türk advirtió que usar la inanición como estrategia bélica podría constituir un crimen de guerra, y manifestó su preocupación por la violencia contra instalaciones esenciales, lo que obstaculiza la ayuda humanitaria y el acceso al agua.