En vísperas del Día Mundial de la Diabetes, que se celebra cada año el 14 de noviembre, Alfredo Yoldi, endocrinólogo de la Policlínica Gipuzkoa, ha expresado su preocupación ante el creciente aumento de la enfermedad a nivel mundial. Durante las últimas cuatro décadas, la prevalencia de la diabetes se ha cuadruplicado, afectando actualmente a uno de cada diez adultos en Euskadi y al 13,8% de la población en toda España, que equivale aproximadamente a 5,3 millones de personas.
Yoldi atribuye este alarmante incremento a factores como la obesidad, el sedentarismo y una dieta poco saludable, características comunes del estilo de vida occidental actual. “Estamos viendo un aumento de casos de diabetes en nuestra población, especialmente entre los jóvenes”, alertó el especialista, señalando además que la genética desempeña un papel significativo, particularmente cuando se combina con la obesidad y la falta de actividad física.
La diabetes se manifiesta en diversas formas: la tipo 2, influenciada principalmente por la genética, obesidad y sedentarismo; la diabetes gestacional, que surge durante el embarazo; y la tipo 1, de origen autoinmune, más común entre niños y jóvenes. Además, la enfermedad puede ser el resultado de enfermedades pancreáticas o ciertos tratamientos médicos, como el uso prolongado de corticoides.
Entre los síntomas más comunes asociados a la diabetes, Yoldi destaca la sed excesiva, la necesidad frecuente de orinar, pérdida de peso inexplicable y una mayor vulnerabilidad a infecciones. Para un diagnóstico certero, recomienda realizar pruebas como la de glucosa en ayunas y de hemoglobina glicosilada, con valores diagnósticos por encima de 110 mg/dl y 126 mg/dl, respectivamente.
El tratamiento eficaz de la diabetes requiere, sin duda, mantener una dieta equilibrada, limitando el consumo de hidratos de carbono de absorción rápida y prefiriendo aquellos ricos en fibra, como el pan integral y las verduras. El ejercicio físico es igualmente esencial para regular los niveles de glucosa en sangre. En cuanto a los atletas, es vital asegurar una adecuada carga de glucógeno en el hígado mediante la ingesta de carbohidratos complejos antes de realizar ejercicio intenso. Asimismo, el uso de medicamentos, incluyendo la insulina, es crucial para el control de la diabetes.
Yoldi compara los niveles de glucosa con el consumo de vino: “En moderación puede ser beneficioso, pero en exceso es perjudicial”. Advierte sobre los riesgos a largo plazo de mantener niveles altos de glucosa, los cuales pueden dañar órganos vitales como la retina, los riñones y el sistema cardiovascular. No obstante, con una adecuada concienciación, prevención y tratamiento, es posible controlar la diabetes y mejorar la calidad de vida de quienes la padecen.
El mensaje del especialista hace hincapié en la importancia de la educación y la concienciación sobre la prevención de esta enfermedad, aprovechando el Día Mundial de la Diabetes como una oportunidad para promover hábitos más saludables y un mejor bienestar entre la población.