Desafíos Humanitarios en Ucrania: Tres Años de Conflicto

María MR

La Misión de Monitoreo de Derechos Humanos de la ONU ha lanzado una contundente advertencia sobre la grave situación de los derechos humanos en Ucrania, tres años después del estallido del conflicto bélico. En una reciente conferencia de prensa, Danielle Bell, responsable de esta misión, destacó la alarmante persistencia de violaciones a los derechos fundamentales, que incluyen ejecuciones, torturas y violencia sexual, especialmente contra el personal militar.

Desde agosto de 2024, se ha observado un notable aumento en las denuncias de ejecuciones de soldados ucranianos capturados, llegando a 81 denuncias consideradas «creíbles». La situación de los prisioneros de guerra es igualmente desoladora; casi el 95% de los soldados ucranianos liberados reportaron haber sufrido torturas o malos tratos. Por su parte, la mitad de los prisioneros de guerra rusos también señaló haber experimentado abusos, sobre todo en las etapas iniciales de su cautiverio.

Las cifras de víctimas civiles son desgarradoras. Más de 12.650 civiles han perdido la vida y más de 29.000 han resultado heridos desde el inicio del conflicto. En 2024, las bajas civiles aumentaron un 30% en comparación con el año anterior, un reflejo de la creciente intensidad de las hostilidades en la región.

En cuanto a la crisis humanitaria, la Oficina de la ONU para Asuntos Humanitarios ha alertado sobre el aumento de la necesidad de asistencia, con muchas regiones en el frente de guerra enfrentando severas escaseces de alimentos y limitado acceso a servicios médicos. Matthias Schmale, coordinador residente de la ONU en Ucrania, enfatizó la difícil realidad de los civiles, que sufren ataques continuos y desplazamientos forzados.

Para 2025, se estima que el 36% de la población ucraniana, aproximadamente 13 millones de personas, necesitará asistencia humanitaria. La ONU ha solicitado 2.600 millones de dólares para ayudar a seis millones de ciudadanos ucranianos a obtener alimentos, atención médica, refugio y protección. La crisis de desplazamiento que atraviesa el país es la más severa que Europa ha visto desde la Segunda Guerra Mundial, con más de diez millones de personas desplazadas, incluyendo 3,7 millones de desplazados internos.

Los niños son un grupo especialmente vulnerable en esta crisis. El Fondo de la ONU para la Infancia ha indicado que uno de cada cinco menores ha perdido a un familiar cercano, y más de 2.500 niños han muerto o resultaron heridos durante el conflicto. Un 25% de los encuestados en relación a necesidades sanitarias indicó que su acceso a atención médica se ha deteriorado, y más del 80% enfrenta dificultades para obtener medicamentos.

Así, la situación humanitaria en Ucrania sigue siendo desastrosa, con un deterioro notable de la salud mental de los niños y un impacto devastador en el sistema educativo debido a los daños en las infraestructuras. La Organización Mundial de la Salud ha documentado más de 2.200 ataques a centros de salud, complicando aún más el acceso a la atención médica que tantos ucranianos requieren en este tragedia prolongada.