En pleno corazón del barrio de Chueca, La Cerda se ha convertido en el destino favorito de las despedidas de soltera en Madrid. Este restaurante se destaca por su estilo provocador y canalla, ofreciendo no solo una propuesta gastronómica original, sino también una experiencia divertida y disruptiva que engancha a los comensales desde el primer instante.
La Cerda se distingue por su ambiente auténtico y su sentido del humor. Su menú incluye hamburguesas rosas, ensaladillas creativas y hot dogs de chopitos rebozados, todos diseñados para sorprender y hacer sonreír a los visitantes. La presentación de los platos, a menudo en formas inusuales como matrioskas en forma de cerdita rosa o tacos dispuestos en un cerdo, asegura que cada comida sea un espectáculo visual que no pasa desapercibido.
Sin embargo, la experiencia en La Cerda no se limita a la comida. La carta de cócteles es igualmente atrevida, con opciones que van desde los clásicos hasta creaciones de autor que sorprenden tanto por sus sabores como por la originalidad de sus recipientes. Entre las estrellas de la coctelera se encuentran el «Peggie Sour», el «Muak Muak», servido en un vaso con forma de labios, y el «Huevo Cerda», que llega en un vaso que simula un huevo dentro de un nido. Cada bebida se convierte en un tema de conversación, contribuyendo al ambiente festivo que caracteriza al lugar.
El local, decorado con llamativos neones y luces rosas, crea un espacio acogedor y alegre, perfecto para grupos que quieren disfrutar de una celebración sin preocuparse por las formalidades. La temática pin-up y los elementos de diseño únicos, como ilustraciones de cerdos en trajes, hacen de cada rincón un espacio digno de ser fotografiado y compartido en redes sociales.
La Cerda se ha consolidado como el lugar ideal donde lo ordinario se transforma en extraordinario. Con un equipo que fomenta la expresión libre y un ambiente vibrante, cada despedida de soltera celebrada en este restaurante se perfila como una fiesta memorable.
