El Ataque en Chernóbil y los Riesgos Persistentes de la Seguridad Nuclear

María MR

Las autoridades ucranianas han informado sobre un grave incidente ocurrido en la antigua central nuclear de Chernóbil, donde un dron ruso con un misil impactó en la instalación durante la noche del viernes. El ataque ha causado daños en el escudo protector que se construyó tras el desastre nuclear de 1986, lo que ha generado una creciente preocupación tanto a nivel nacional como internacional.

El Organismo Internacional de Energía Atómica (IAEA) y la ONU emitieron una declaración conjunta, calificando el ataque como “un incidente profundamente preocupante”. Según testimonios, el ataque provocó un incendio visible desde las instalaciones del IAEA, que cuenta con un equipo presente en el sitio de Chernóbil. La explosión fue registrada a la 1:50 de la madrugada, seguida de humo y llamas.

Rafael Mariano Grossi, director general del IAEA, reportó que los servicios de emergencia intervinieron rápidamente para controlar el incendio, que continuó ardiendo de manera intermitente durante varias horas. Este suceso reaviva el debate sobre la seguridad en las instalaciones nucleares de Ucrania, particularmente en un lugar tan emblemático como Chernóbil, donde hace más de tres décadas se produjo uno de los peores desastres nucleares de la historia.

A pesar de la brecha en la capa exterior del Nuevo Edificio de Confinamiento Seguro (NSC), Grossi aseguró que los niveles de radiación, tanto dentro como fuera de esta estructura, permanecen normales y estables. Afortunadamente, hasta el momento no se han reportado víctimas ni fugas de material radiactivo.

Chernóbil había estado bajo control ruso al inicio de la invasión a Ucrania, pero fue recuperada en marzo de 2022. Tras este reciente ataque, el IAEA ha reiterado la necesidad de prestar atención constante a la seguridad nuclear y ha solicitado a todas las partes involucradas que se abstengan de realizar cualquier actividad militar cerca de los emplazamientos nucleares en Ucrania, advirtiendo que los riesgos para la seguridad continúan mientras persista el conflicto. La agencia se ha comprometido a mantener informada a la comunidad internacional conforme se disponga de nueva información.