Que la protección del ecosistema y el medioambiente ha de ser una prioridad para todos es algo que no es cuestionable en los tiempos actuales. Si tú lo tienes claro y quieres conseguir un estilo de vida sostenible al máximo, tendrás que modificar algunas de tus costumbres. Sin embargo, lograrlo es posible. Te animamos a intentarlo cuanto antes con algunos consejos que te vendrán muy bien.
No se trata de cambiar tu casa de arriba abajo, de instalar paneles solares y tirar todos los electrodomésticos a la basura (empezando por los que más consumen). Se trata más bien de hacer algunos ajustes que te ayuden a llevar un estilo de vida sostenible, más natural y acorde al siglo XXI en el que te ha tocado vivir.
Si te pones a ello pronto te darás cuenta de que no tendrás que acometer cambios drásticos ni en tu casa ni en tu vida. El hecho de querer adoptar un estilo de vida sostenible ya dice mucho de ti, de tu forma de pensar y actuar. Con un pequeño esfuerzo por tu parte (y por la de tu familia) podrás incorporar algunas rutinas que contribuirán a proteger y cuidar el medioambiente.
Apuesta por las tres R para un estilo de vida sostenible
Grábatelas a fuego en la memoria porque se van a convertir en tu guía a partir de ahora: REDUCIR, REUTILIZAR y RECICLAR. El objetivo no es otro que tratar de conseguir un consumo responsable en todos los ámbitos de la vida, desde las adquisiciones que hacemos en lo que a moda y entretenimiento se refiere, hasta la compra de productos alimenticios.
Plantéate si necesitas tantas y tantas cosas como compras, y piensa en reducir el consumo también en casa. Por ejemplo, seguro que puedes reducir el consumo en productos de limpieza para la casa o comprar menos ropa y complementos (a veces tenemos tantas y tantas prendas y objetos que ordenar los armarios puede convertirse en un auténtico suplicio).
Piensa en todas las cosas que forman parte de tu día a día a las que podrías darles una segunda oportunidad para alargar su vida útil. Reutilizando los objetos evitamos el despilfarro y el consumo innecesario.
Reciclar, un pilar fundamental
Seguro que reciclar es una de las cosas que haces en casa, pero nunca está de más recordar la importancia que tiene. No solamente desde el punto de vista de la gestión de los residuos, sino como concepto esencial en un estilo de vida saludable.
Tenemos que apostar por materiales susceptibles de ser reciclados; abandonar los plásticos y optar por el cartón y el papel en la medida de lo posible. De hecho, cada vez son más los comercios que ponen a disposición de los clientes bolsas de papel. Sobre todo desde que las bolsas de plástico ya no son gratuitas. Vamos caminando hacia un panorama comercial en el que, no solo no serán gratis, sino que dejarán de existir. Todo llegará…
Dile adiós al plástico
Si no puedes desterrarlo de tu vida totalmente, seguro que puedes eliminarlo al máximo. Fuera recipientes, fuera envases, bolsas y utensilios. Quédate con lo esencial y apuesta por materiales más naturales. Todos sabemos lo importante que puede ser llevar a la compra una bolsa de tela, por mucho que parezca un gesto nimio y poco determinante. Sin embargo, es fundamental poner nuestro granito de arena para proteger el medioambiente, ¿no crees?
En la cocina siempre podemos elegir recipientes de cristal, vajillas de loza y utensilios de madera, en lugar del contaminante plástico. Y si no queda otro remedio, mejor optar por los envases reutilizables, desde la tartera donde guardas los alimentos sobrante, hasta el envase donde le pones a tus hijos el tentempié para el cole.
El agua es un tesoro
Y como tal has de tratarla. ¿A que no se te ocurriría tirar a la basura el dinero en forma de billetes de 20 euros o de monedas? Pues no te dejes el grifo abierto bajo ningún concepto, porque estarías haciendo lo mismo… Ahorrar agua ha de convertirse en una prioridad absoluta.
Reparar los grifos que gotean, instalar dispositivo de ahorro en ellos (como aireadores), procurar aprovechar el agua de riego en el jardín, o utilizar bien los electrodomésticos son algunas de las cosas que puedes hacer para rentabilizar al máximo el consumo de agua de tu hogar.
Aprovecha el poder del sol
Cada vez es más fácil instalar placas solares en tu casa para contar con las ventajas de la energía solar fotovoltaica y también hay otras maneras a menor escala relacionadas con energía solar que puedes incorporar a tu vida y a tu casa, como las lámparas solares de exterior para el jardín o la terraza.
Este tipo de dispositivos se cargan durante el día y emiten la luz por la noche. No solo son muy aconsejables desde el punto de vista de la sostenibilidad, sino que supondrán un ahorro para tu bolsillo.
Ya ves cuántas pequeñas (pero importantes) cosas se pueden hacer para adoptar un estilo de vida sostenible y en aras de un consumo más responsable. Tan solo hay que proponérselo y querer hacerlo. ¿Te animas?