Jóvenes Protestan Frente a la RAE por la Brecha Generacional Lingüística

María MR

En Madrid, un llamativo y singular espectáculo tuvo lugar cuando un grupo de jóvenes, vestidos de dinosaurios, realizó una manifestación frente a la Real Academia Española (RAE). Esta protesta, organizada por el colectivo We are Family, buscaba poner de relieve la creciente «brecha lingüística» que existe entre las distintas generaciones, y cómo el lenguaje empleado por los jóvenes ha ido evolucionando hasta convertirse, en algunas ocasiones, en un obstáculo para la comunicación con personas de mayor edad.

A lo largo de la manifestación, la capital española se vistió de expresiones como «funar», «salseo», «lache» y «beef», las cuales aparecieron en coloridos carteles. El propósito no solo era captar la atención, sino también provocar una reflexión sobre el significado y el uso de estas palabras. La respuesta fue inmediata: miles de ciudadanos, tanto en las calles como en las redes sociales, intentaron descifrar el significado de estas expresiones, descubriendo de manera divertida un lenguaje con el que, según un estudio, más de la mitad de los españoles mayores de 40 años tienen dificultades para comprender.

Los barrios de Callao, Malasaña y Chueca se convirtieron en el epicentro de este movimiento, destacando la rapidez con la que el argot juvenil cambia y evoluciona, dejando de lado en gran medida el uso del lenguaje formal. Términos que alguna vez formaron parte del vocabulario juvenil, como ‘dabuten’, ‘chachipiruli’ o ‘nasti-de-plasti’, han sido reemplazados por otros que reflejan una evidente influencia de la digitalización y la globalización.

La acción llevada a cabo por We are Family no busca únicamente mostrar la velocidad con la que cambia el lenguaje, sino también abrir un debate intergeneracional sobre el papel del lenguaje como herramienta para conectar y comprender. Mientras el mundo se globaliza rápidamente, surge el interrogante de si las normas lingüísticas deberían adaptarse a estos nuevos idiomas emergentes o mantenerse inalterables. Las generaciones Z y Alpha ejemplifican cómo la era digital ha generado un lenguaje distintivo, a menudo desconocido para las generaciones anteriores.

Este evento en Madrid forma parte de un proyecto más amplio que pretende fomentar un diálogo abierto sobre la evolución del lenguaje y su repercusión cultural en la sociedad actual. La campaña busca transmitir un mensaje claro: el lenguaje es un organismo vivo que debe unir, no dividir.