El coordinador humanitario de la ONU en Ucrania, Matthias Schmale, ha condenado enérgicamente el ataque con misiles perpetrado en Krivói Rog el pasado viernes, que dejó un saldo trágico de más de diez muertos, entre ellos al menos nueve niños, así como varios heridos. Schmale expresó su profunda indignación ante este nuevo acto de agresión dirigido a la ciudad, situada en la región de Dnipropetrovsk.
En sus declaraciones, el coordinador humanitario destacó la alarmante frecuencia de estas embestidas contra áreas pobladas de Ucrania, que siguen cobrando la vida y causando mutilaciones entre la población civil. Schmale subrayó que el costo emocional y físico que estas acciones representan para las familias es insoportable y recordó que, según el derecho internacional humanitario, los civiles deben estar protegidos y no ser considerados objetivos de ataque.
Por su parte, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) lanzó un llamado urgente para que cesen inmediatamente los ataques contra zonas civiles en Ucrania. Regina De Dominicis, directora regional de UNICEF para Europa y Asia Central, lamentó profundamente el ataque en Krivói Rog y la pérdida de vidas inocentes, incluyendo la de un bebé de apenas tres meses. Se informó que el misil impactó en un barrio residencial durante la noche del viernes, cuando muchas familias se preparaban para disfrutar del fin de semana, destruyendo viviendas, escuelas y un restaurante en el proceso.
De Dominicis describió escenas desgarradoras de padres llorando al abrazar los cuerpos de sus hijos muertos, afirmando que “ningún niño debería sufrir jamás semejante terror” y que “ningún padre debería soportar jamás semejante dolor”. Además, UNICEF ha activado su red de apoyo para ayudar a las familias afectadas, trabajando en coordinación con las autoridades locales para proporcionar asistencia de emergencia.
Desde el inicio de la guerra en Ucrania en febrero de 2022, más de 2,500 niños han perdido la vida o han resultado heridos en este contexto de violencia, lo que De Dominicis califica como «futuros robados». En sus declaraciones, enfatizó la necesidad urgente de poner fin al uso de armas explosivas en zonas pobladas y a los ataques a instalaciones civiles que impactan desproporcionadamente a los niños, reiterando la importancia de proteger a la infancia en medio de esta crisis.