Durante el año 2023, Lidl ha reafirmado su papel como un actor económico crucial en Cataluña, aportando un notable total de 1.400 millones de euros al Producto Interior Bruto (PIB) de la región. Esta contribución supone aproximadamente el 0,55% del PIB autonómico, según los datos revelados en el Informe de Impacto Corporativo 2023 de Lidl, elaborado por PwC. Además de su impacto económico, la cadena de supermercados ha tenido un papel destacado en el ámbito social, generando alrededor de 27.890 empleos en Cataluña. Desde su llegada en 1994, la empresa ha demostrado su compromiso con la comunidad catalana, invirtiendo más de 6.700 millones de euros en la región durante los últimos seis años.
El ámbito económico encabezado por Barcelona es evidente, al aportar 785 millones de euros al PIB catalán. Asimismo, la provincia de Girona se distingue por su importante contribución al empleo, representando un 1,56% del total regional. La expansión de Lidl en la región también ha avanzado notablemente con la apertura de nuevos puntos de venta en localidades como Sant Feliu de Guíxols, Barcelona, Sant Joan Despí y Ripoll, además de la inauguración de un nuevo centro logístico en Constantí, Tarragona.
A nivel nacional, Lidl ha alcanzado un hito significativo en 2023 con una aportación récord de 8.672 millones de euros al PIB de España, lo cual representa un incremento del 6% con respecto al año anterior. Este impacto positivo se refleja en una amplia red de proveedores que beneficia principalmente a sectores clave como la agricultura, la ganadería y la industria de alimentación y bebidas. Con la generación de 180.389 empleos a través de sus operaciones directas, indirectas o inducidas, Lidl se consolida como un empleador dominante en el mercado laboral español.
Además, Lidl ha consolidado su influencia en el fomento de productos autóctonos, mediante colaboraciones con más de 170 proveedores locales y mostrando un firme apoyo a la industria agroalimentaria de Cataluña y del resto de España. Este compromiso no solo fortalece la economía local, sino que también promueve la «Marca España» en el ámbito internacional.
La estrategia de Lidl, enfocada en la sostenibilidad y en la creación de valor compartido, se traduce en un impacto económico, social y laboral significativo en las comunidades donde opera. Este enfoque subraya su objetivo de convertirse en la opción preferida tanto para sus clientes como para sus empleados, contribuyendo así al desarrollo sostenible y al bienestar de las sociedades locales.