Miguel Moragues, un reconocido óptico-optometrista de La Rioja, ha asumido la presidencia de la Fundación Cione Ruta de la Luz desde enero de este año. Con una destacada trayectoria dentro de la organización, Moragues ha participado activamente como cooperante, miembro del patronato y voluntario en diversos proyectos solidarios, entre los que se incluye el exitoso programa «Ver para Crecer».
Fundada en el año 2000, la Fundación Cione ha desarrollado una intensa labor en cooperación internacional en el ámbito óptico, iniciando su actividad en la década de 1990 con expediciones a Mauritania. Durante estas misiones, optometristas y oftalmólogos realizaron miles de revisiones visuales y distribuyeron gafas graduadas a quienes más lo necesitaban. Desde entonces, la entidad ha crecido, convirtiéndose en un referente de la salud visual no solo en España, sino también en diversas regiones de África y América.
En su nuevo rol, Moragues ha subrayado la importancia de la labor humanitaria de la Fundación y su compromiso con los colectivos más desfavorecidos. El principal objetivo de la Ruta de la Luz es mejorar la salud visual de las personas en riesgo de exclusión social. El nuevo presidente ha afirmado que es fundamental abordar estos problemas, ya que la salud visual es un aspecto vital para el desarrollo personal y profesional.
La Fundación no solo se dedica a proporcionar asistencia, sino que también ha implementado proyectos orientados a fomentar la autosuficiencia en las comunidades. Un ejemplo significativo es un proyecto en Mozambique que ha promovido el autoempleo local, permitiendo a las personas valerse por sí mismas en lugar de recibir soluciones temporales.
Desde 2015, la Ruta de la Luz ha ampliado sus actividades en España con el programa «Ver para Crecer», diseñado para atender necesidades locales en salud visual. Moragues ha apuntado que a menudo se ignoran las necesidades sanitaras en el propio país y ha reiterado la importancia de no desatender a la población cercana.
Moragues asume el liderazgo de la Fundación en un momento en que Ismael García Paya, quien ha estado al frente durante nueve años, lo ha dejado preparado para continuar con un legado exitoso en la cooperación internacional. García Paya ha expresado su agradecimiento a todos los colaboradores y entidades que han apoyado el trabajo de la Fundación, mostrando su confianza en que Moragues continuará este camino.
El nuevo presidente ha instado a la sociedad a informarse y respaldar la labor de la Fundación, afirmando que «la Ruta de la Luz merece la pena». Con una visión renovada y un profundo conocimiento de la organización, Miguel Moragues se prepara para llevar a la Fundación hacia nuevos horizontes en su compromiso con la salud visual.
