Samsung Electronics ha revelado sus resultados financieros correspondientes al primer trimestre de 2025, que finalizó el 31 de marzo. La compañía reportó ingresos consolidados de 79.14 billones de wones, marcando un récord histórico para un trimestre. Este hito se ha visto impulsado por las sólidas ventas de los teléfonos inteligentes Galaxy S25, así como de otros productos de alto valor agregado. A pesar de los desafíos en su División de Semiconductores, la firma logró un beneficio operativo de 6.7 billones de wones.
Se destaca que Samsung ha asignado este año su mayor gasto anual en investigación y desarrollo, aumentando su inversión en I+D en un 16% en comparación con el mismo periodo del año anterior, alcanzando un total de 9 billones de wones. En medio de la creciente incertidumbre económica global y tensiones comerciales, la empresa está implementando diversas estrategias para asegurar su crecimiento. Se prevé que, si estas incertidumbres disminuyen, el desempeño de la compañía mejorará en la segunda mitad del año.
En el área de semiconductores, la División reportó ingresos consolidados de 25.1 billones de wones con un beneficio operativo de 1.1 billones de wones. Las ventas en el negocio de Memoria fueron impulsadas por un aumento en la venta de DRAM para servidores, aunque los beneficios generales se vieron afectados por la erosión de los precios de venta y una disminución en las ventas de HBM debido a controles de exportación sobre chips de inteligencia artificial.
Mirando hacia el segundo trimestre, se anticipa una robusta demanda en el negocio de Memoria para servidores de IA, y la compañía busca fortalecer su posición en el mercado de alto valor agregado. En el sector de móviles y PCs, se espera una expansión de la inteligencia artificial, lo que requerirá que el negocio de Memoria se adapte proactivamente a esta tendencia.
La División de Sistemas LSI experimentó una leve mejora en ganancias gracias a un incremento en la oferta de sensores de alta resolución. A pesar del lento mercado de smartphones, espera estabilizar sus ingresos en el segundo trimestre al promover la adopción de su sistema en chip (SoC) por parte de un cliente importante.
En cuanto a la División de Pantallas, reportó ingresos de 5.9 billones de wones con un beneficio operativo de 0.5 billones, presentando resultados mixtos en el negocio de pantallas móviles, aunque mejoró en el segmento de grandes pantallas debido al lanzamiento de nuevos monitores QD-OLED.
Finalmente, el negocio de móviles y redes generó 37 billones de wones en ingresos y 4.3 billones en beneficios operativos, impulsados por las exitosas ventas de la serie Galaxy S25. La compañía planea seguir enfocándose en su línea de productos insignia, incluyendo el lanzamiento del Galaxy S25 Edge y la expansión de smartphones con capacidades de inteligencia artificial. En el sector de visualización, se registraron 14.5 billones de wones en ingresos y 0.3 billones en beneficios operativos, destacando las sólidas ventas de productos estratégicos como televisores Neo QLED y OLED. Para el segundo semestre, la empresa se centrará en capturar la demanda de la temporada alta a través de colaboraciones estratégicas con distribuidores.