Las suculentas son una de las plantas más fáciles de cuidar y también de las que te ofrecen una forma, color y tamaño tan diversa que para cada persona hay una diferente. Se caracterizan por no tener apenas mantenimiento ya que almacenan agua a través de las hojas, de los tallos o incluso de las raíces, y eso hace que resistan a la persona más despistada.
Pero, además, es que hay algunas suculentas raras que destacan por esa belleza única que tienen. ¿Qué tal si te hablamos de algunas de ellas? Presta atención porque te van a encantar y podrías tenerlas tanto fuera de tu casa, en terrazas, balcones, etc., como dentro en zonas donde tengan mucha luz y algo de sol directo (sobre todo las variegadas). ¿Empezamos?
Haworthia cooperi var. truncata
Comenzamos con una de las suculentas originaria de Sudáfrica y caracterizada por tener hojas triangulares y translúcidas. Sí, así es, casi son transparentes. Todas ellas se conforman en una roseta con aspectos geométricos que le dan una apariencia única
Es una joya para los coleccionistas y los amantes de las plantas. Además, en primavera es cuando florece, con unas pequeñas flores blancas que combinan a la perfección con el verde intenso (o las distintas tonalidades de verde) que tienen sus hojas.
Fenestraria rhopalophylla. Las suculentas Pies de bebé
Quizá por este nombre no te suene, pero sí se vende con el sobrenombre de “pies de bebé”. Al igual que la anterior, es de Sudáfrica y tiene unas hojas cilíndricas de color verde que crecen en racimos.
En primavera, si todo va bien y la planta está bien cuidada, verás que echa unas flores que pueden ser blancas o amarillas. Eso combina con las hojas verdes que tiene le dará un toque muy curioso a tu jardín o a la maceta en que la tengas.
Conophytum calculus
Esta es una de las suculentas más raras que vas a encontrar. Sobre todo porque realmente la planta que tendrás es una bola verde en la maceta, varias si tienes más plantas así. Es parecida a otras plantas piedra, solo que en este caso tiene esa forma redondeada.
En primavera es la estación en que del centro de esa bola saldrán una flor normalmente de color amarilla, no demasiado grande pero sí acorde al tamaño de la bola. El resto del año seguirá siendo una bola regordeta y curiosa para tenerla como planta decorativa en casa.
Adromischus cristatus
Esta suculenta se caracteriza por tener unas hojas alargadas, gorditas y terminadas en ondas en el borde de estas. Crece en grupo de tal forma que parecerá que forman rosetas.
Al igual que todas las demás, florece en primavera con unas flores pequeñas que pueden ser de varios colores pero que le dan un toque único a la planta.
Aloe polyphylla (Aloe espiral)
Si te gusta el aloe, ¿sabías que hay varias suculentas diferentes de esta? Una de ellas es el aloe espiral, que, como habrás pensado, crece con las hojas en espiral alrededor de un centro, creando un efecto visual impresionante.
En primavera producirá unas racimos de flores rojas en formas de campana. Eso sí, cuidado porque es de las que suele atraer a las abejas. También a los colibríes pero en España estas aves no se ven.
Astrophytum asterias
A ver, no, no nos hemos equivocado. Sabemos que un cactus no es una suculenta. Pero este en concreto, que tiene forma esférica, y además carece de espinas, se asemeja más a una suculenta.
En primavera, este cactus echará flores blancas o amarillas y llamará la atención porque contrasta bastante con el verde moteado de su forma. Además, tienes la versión variegada donde el color cambia radicalmente.
Tylecodon paniculatus
¿Te imaginas una suculenta con forma de árbol? Pues esta es una de esas suculentas (porque en realidad hay más. Tiene forma de arbusto y sus hojas son carnosas y de color gris-verde.
En primavera echará unas flores en forma de racimos de color rosa pálido que suelen ser muy atractivas para las mariposas y las abejas.
Huernia zebrina
Conocida por su distintivo patrón de rayas en forma de zigzag, es una de las suculentas raras que podrías tener en casa. Al principio sus “hojas” son verdes, y más allá de ese patrón en zigzag no parecen tener nada más llamativo.
Pero cuando en primavera florece, las flores que echa son en forma de estrella. Eso sí, cuidado porque se dice que tienen un aroma a carne podrida, así que si no te gusta eso, mejor no comprarla.
Echeveria Rainbow
Dentro de las Echeverias podríamos hablarte de cientos de ellas, a cada cual más bonita. Pero hemos querido elegir la Echeveria Rainbow porque se dice que es una de las más bonitas del mundo. Se caracteriza por tener unas hojas en forma multicolor, razón por la que se le llama arcoíris. En realidad, es la forma variegada de la Echeveria Perle von Nürnberg.
En primavera te alegrará la vista aún más con unas flores rosa coral.
Como ves, hay muchas suculentas raras. Y nos hemos dejado por el camino muchísimas más. Si tienes una casa en la que disfrutas del sol, ya sea en una zona, en el jardín, etc. apuesta por ellas. Apenas tendrás que cuidarlas y cuando te fijes en ellas verás que son todo un espectáculo. ¿Nos recomiendas alguna que tú conozcas?
