¿Sabías que hay muchos tipos de jardines? Estos son muy diversos en función de su diseño, así como en el uso que le des a este.
Pero, ¿cuáles hay? ¿Y cómo son? De todo eso es de lo que te vamos a hablar a continuación. Descubre cuál podría ser tu estilo y transforma el jardín que tengas en uno parecido. ¿Te animas a ello?
Tipos de jardín
¿Alguna vez has pensado en cómo se podría ver tu jardín aplicando algunos tipos? Nos referimos, ¿y si hicieras un jardín de cactus y suculentas? ¿O si fuera mejor un jardín vertical para cubrir las paredes? ¿Te imaginas uno de estilo zen?
En realidad hay muchos tipos de jardines y a veces no se tienen en cuenta a la hora de decorar esta parte de la casa. ¿Quieres que no te pase eso? Entonces echa un vistazo a los más habituales para descubrir distintas decoraciones.
Jardín formal
Este tipo de jardín se caracteriza por un diseño simétrico y geométrico. Suelen ser muy elegantes y se utilizan a menudo para complementar edificios clásicos o históricos. Estos jardines suelen incluir setos recortados, parterres y fuentes.
Para que te hagas una idea, son aquellos que se ven en películas y series de época (del siglo XIX o siglo XX), que parecen «cuadriculados».
Jardín inglés
El jardín inglés es un estilo más relajado y natural que el jardín formal. Suelen incluir senderos serpenteantes, césped, arboledas y áreas de flores y arbustos. Este tipo de jardín es ideal para un ambiente campestre y relajado.
No es fácil tenerlo, porque necesita contar con un espacio amplio para poder dividirlo en zonas y, sobre todo, para construir esos senderos. Pero si tienes un jardín amplio podrías considerarlo.
Jardín mediterráneo
Este tipo de jardín se inspira en las regiones mediterráneas, y utiliza plantas típicas de esas zonas, como la lavanda, el romero y la salvia. Suelen incluir paredes de piedra, caminos de grava y fuentes.
Jardín japonés
Es de los tipos de jardín que más fama tiene, y quizá sea porque rompe con todo lo que se imagina de un jardín. Sigue la filosofía del zen y se basa en simplicidad y naturaleza.
Sin embargo, en lugar de mucha vegetación, prefiere incluir piedras, arena, musgo, arroyos y pequeños estanques con carpas koi.
Jardín de rocas
Como su nombre indica, se basa en el uso de rocas, arena y gravilla para crear un paisaje seco y rocoso similar a un paisaje natural de montaña. Suelen incluir pequeñas plantas y arbustos para darle un toque de color.
Ten en cuenta que no es solo roca, sino que también tienes que poner algo de vegetación para que parezca más una zona montañosa.
Jardín de agua
Se centra en elementos que tengan relación con el agua. Por eso, incluye un estanque o una piscina como elemento central. Suelen dar ese toque verde con plantas acuáticas y nenúfares, y a menudo se utilizan fuentes y cascadas para crear un ambiente tranquilo y relajante.
Jardín de hierbas
No, no nos estamos refiriendo a que dejes crecer las malas hierbas y que se convierta en uno salvaje donde sabe uno lo que puede encontrarse (y que no querrás ni pisar). En este tipo de jardín lo característico es usar hierbas aromáticas y culinarias, como menta, albahaca, orégano y tomillo. Estas pueden ser plantadas en macetas o en tierra y suelen ser muy prácticos para tener acceso fresco a hierbas para cocinar.
Jardín de mariposas
Este tipo de jardín se enfoca en atraer mariposas y otros polinizadores al jardín. Suelen incluir plantas que son atractivas para estos insectos, como la lavanda, la mariposa bush y el verbena.
Jardín de cactus y suculentas
Puedes encontrarte aquí con plantas resistentes a la sequía, por lo que si vives en una zona de clima templado o cálido será ideal. Suelen incluir rocas y arena para crear un paisaje desértico y pueden ser una buena opción para zonas con clima árido.
Jardín de rosas
Este tipo de jardín se enfoca en el cultivo de diferentes tipos de rosas. Suelen incluir variedades de rosas en distintos colores y alturas y pueden ser muy elegantes y románticos. Ideal para los amantes de las rosas y los coleccionistas de estas.
Jardín comestible
Como su nombre indica, el tipo de plantas que vas a poner aquí son aquellas que puedas cultivar para después comer. Es decir, un huerto, árboles frutales, hierbas aromáticas, etc. Es una forma de ahorrar y al mismo tiempo de tener productos que puedes consumir y disfrutar de la vegetación que los produce.
Eso sí, requiere de más esfuerzo y cuidados para obtener los cultivos.
Jardín vertical
Terminamos con el jardín vertical, que se caracteriza por utilizar estructuras verticales para cultivar plantas, como enredaderas, trepadoras y hierbas. Pueden ser una buena opción para espacios pequeños o para añadir un toque verde a paredes y muros.
Como ves, hay muchos tipos de jardines, unos más adecuados para algunos y otros para otros. Nuestra recomendación es que busques imágenes de cada uno de ellos, incluso de otros que no te hemos nombrado para que veas cómo quedarían y así puedas pensar si es el estilo de jardín que te gustaría en tu casa o, por el contrario, no lo ves. ¿Nos recomiendas algún tipo más?
