El dormitorio es nuestro refugio personal, el espacio donde nos relajamos y recargamos energías tras un día ajetreado. Por lo tanto, es crucial que esté diseñado con cuidado, teniendo en cuenta tanto la estética como la funcionalidad, pero conseguir esto no siempre es sencillo.
Cómo diseñar un dormitorio
Son mucha las cosas que hay que tener en cuenta a la hora de diseñar y amueblar nuestro dormitorio, como es la elección de la cama, los colores de las paredes o la iluminación. Para que este proceso sea más sencillo, hoy os queremos compartir algunos tips que os ayudarán a amar un dormitorio completo y cómodo en vuestro hogar.
El protagonista: el colchón
En cualquier dormitorio, el colchón es el gran protagonista. En el mercado existen una gran variedad de modelos de colchones, pero a la hora de elegirlo deberíamos apostar por la calidad. A largo plazo, un buen colchón no solo beneficia tu descanso sino también tu salud, especialmente tu espalda. En este sentido, es vital elegir la firmeza que mejor se adapte a tu cuerpo.
También es importante elegir un tamaño que se adecue al espacio de tu habitación y a tus necesidades. Las camas individuales son ideales para niños o habitaciones de huéspedes, mientras que las camas matrimoniales o king size son más adecuadas para parejas.
Soporte esencial: la cama
La cama es otro de los elementos importantes en cualquier dormitorio, por lo que acertar en su elección es primordial. Si tu dormitorio es pequeño, considera camas con cajones debajo. Estos espacios adicionales son ideales para guardar ropa de cama, almohadas adicionales o incluso ropa de temporada.
En relación con las camas podemos hablar de los cabeceros, mobiliario que pueden actuar como punto focal en el dormitorio, aportando elegancia. Los hay de madera, tapizadas, metálicas; elige la que más vaya con tu estilo.
Versatilidad: sofá cama
En el caso de buscar un espacio multifuncional, y siempre que dispongamos espacio para ello, un sofa cama puede ser una excelente inversión. Durante el día, funciona como un sofá y por la noche, se convierte en una cama. Lo bueno de esto, es que hay una amplia variedad de estilos y tamaños disponibles. Asegúrate de elegir uno que armonice con el resto de tu decoración y que tenga un mecanismo sencillo de abrir y cerrar.
Comodidad adicional: las almohadas
Para alcanzar el descanso pleno, además del colchón es importante elegir la almohada que mejor se adapte a nuestro cuerpo y forma de dormir. Las almohadas de espuma viscoelástica o látex ofrecen un buen soporte para la cabeza y el cuello. Si prefieres algo más tradicional, las almohadas de plumas o fibra sintética son una excelente opción.
En el caso de que busquemos darle un toque decorativo, también podemos optar por el uso de cojines. Estos brindan un toque estético y son ideales para leer o ver televisión en la cama.
Iluminación adecuada
La iluminación es un factor muy importante para cualquier estancia de la vivienda, y el dormitorio no iba a ser menos. Una lámpara colgante o una luz de techo con un regulador puede ayudarte a ajustar el ambiente de tu dormitorio según el momento del día. Las lámparas de mesa son perfectas para la lectura. Asegúrate de que estén al nivel adecuado para evitar forzar la vista.
Almacenamiento extra: mesas de noche y cómodas
Las mesitas de noche son esenciales para tener a mano lo que necesitas, como un libro, el móvil o un vaso de agua. De igual forma, el uso de cómodas son perfectas para guardar todo tipo de ropa, especialmente si no tienes un armario grande. Pueden ser un punto focal en el diseño del dormitorio.
Personaliza tu espacio
A la hora de darle ese toque personal al dormitorio, los textiles pueden sernos de mucha ayuda. Las cortinas, alfombras y ropa de cama pueden transformar por completo la estética de tu habitación. Juega con colores y texturas.
Otros elementos que podemos utilizar para personalizar el espacio del dormitorio son los cuadros, espejos u otros objetos decorativos que aporten personalidad y calidez a ese espacio. Eso sí, no debemos sobrecargarlo, y para ello es importante tener en cuenta que menos es más.
Espacios auxiliares
En el caso de contar con espacio suficiente, puedes optar por crear espacios auxiliares. Una opción es la de crear un rincón de lectura formado por un sillón cómodo, una mesita y una estantería los libros. Otra opción, podría ser, un espacio dedicado para el maquillaje donde ubicar un espejo con sistemas de almacenaje.
Armar un dormitorio completo no se trata solo de llenar un espacio con muebles, sino de crear un refugio personal que refleje tus gustos y necesidades. Con una planificación adecuada y una selección cuidadosa, tu dormitorio no solo será estéticamente agradable, sino también un espacio de comodidad y tranquilidad.
