La Red de Ciudades y Villas Medievales ha finalizado su circuito de siete pruebas populares con gran éxito, cerrando el año 2024 de una manera espectacular. Este evento ha tenido como objetivo poner en valor el patrimonio histórico y fomentar la práctica deportiva en algunas de las localidades más pintorescas de la Península Ibérica. Las últimas competencias del circuito incluyeron las tradicionales San Silvestre de Sigüenza y de Estella-Lizarra, eventos que lograron reunir a cientos de atletas en un ambiente festivo y de competición.
Denominado «Red-Corriendo el Medievo», este circuito ha sido particularmente atractivo para los aficionados al running, ya que permite disfrutar de una experiencia que combina turismo y deporte. A través de los encantadores cascos históricos de las localidades que participaron, los corredores no solo pusieron a prueba su resistencia, sino que también se sumergieron en la riqueza cultural de estas regiones.
El calendario del circuito comenzó el 25 de febrero con el Trail Marvão, que acogió a más de 500 atletas en competencias de 21 y 10 kilómetros. Inspirándose en la figura histórica de Ibn Marúan, fundador de Marvão, esta prueba fue el epítome de la unión entre deporte y legado histórico. En un gesto de camaradería, al finalizar la carrera se llevó a cabo un sorteo que concluyó con un premio a un viaje a Jerez de los Caballeros.
Más adelante, el 14 de agosto, Jerez de los Caballeros se iluminó con la IX Carrera Nocturna ‘Recorriendo el Medievo’, en la que los participantes disfrutaron de un recorrido singular de 5 kilómetros en un entorno cargado de historia. El sorteo de esa noche benefició a Francisco José Ciria, quien recibió un viaje a Marvão. Días después, el 17 de agosto, los atletas se trasladaron a Almazán para participar en la X Carrera Monumental Nocturna, donde la combinación de belleza histórica y un ambiente relajado resultó en un evento exitoso.
La celebración de las fiestas de ‘San Juan Degollao’ en Laguardia el 28 de agosto incluyó el ‘Cross Popular de San Juan Degollao’, premiando a Oihana Soto con un viaje a Estella-Lizarra. El 27 de octubre, la XXV edición de la Donibane Lohizune-Hondarribia atrajo a corredores de toda la región con una distancia de 21.1 kilómetros.
El año concluyó con dos eventos memorables el 31 de diciembre. La XI San Silvestre de Estella-Lizarra no solo fomentó la actividad deportiva, sino que también incorporó un enfoque solidario. La XV San Silvestre Seguntina, por su parte, celebró un récord de participación, añadiendo un matiz especial al IX Centenario de la Reconquista de la ciudad. Daniel Caudevilla se llevó el premio del viaje a Almazán durante esta última carrera, marcando un final triunfal para el circuito de este año. Esta iniciativa ha demostrado ser un destacado ejemplo de cómo el deporte, la historia y la comunidad pueden entrelazarse para crear experiencias memorables.