Un grupo internacional de científicas ha decidido adoptar una dieta 100% vegetal durante una expedición en la Antártida, donde su investigación se centra en el cambio climático. Estas mujeres participan en el reto Veganuary, una iniciativa que invita a los interesados a probar el veganismo durante el mes de enero y más allá. Su elección busca resaltar la relevancia de la alimentación en la actual crisis climática.
La mayoría de las integrantes planea mantener su dieta vegana durante toda la duración de la expedición, que se extenderá más allá del mes de enero. Ellas pertenecen al programa global «Homeward Bound,» diseñado para capacitar a mujeres y personas no binarias en áreas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. A través de este viaje, el grupo busca educar sobre la vulnerabilidad de la Antártida frente al calentamiento global, así como construir una comunidad de líderes científicos comprometidos con la acción climática.
Cada participante ha compartido sus motivaciones para unirse a Veganuary. Alba Fernández Sanlés, bióloga molecular, explicó que su interés por una dieta basada en vegetales comenzó por preocupaciones hacia el bienestar animal, pero que ahora también lo percibe como una responsabilidad frente a la crisis climática. Marta Crespo, ingeniera agrícola, expresó que al unirse a Veganuary busca reducir su huella de carbono, creyendo firmemente que el verdadero cambio empieza por disminuir el consumo. Emily S. Cross, catedrática de neurociencia, ve esta experiencia como una oportunidad para mostrar a sus hijos una forma de alimentación sabrosa y sostenible.
Otros miembros del equipo, como Catherine Barry, Jess Leck y Devin Fitzpatrick, afirman que una dieta basada en plantas puede minimizar el impacto ambiental. Fitzpatrick, quien ha dejado de comer carne desde hace más de doce años, considera que Veganuary es una estrategia eficaz para concienciar sobre un estilo de vida más sostenible.
Natalia Atuesta Escobar, ingeniera ambiental, subrayó la relevancia de la alimentación como un elemento clave en la lucha contra los problemas climáticos. Kristina Burrack, inmunóloga y profesora, también ha decidido explorar Veganuary, recordando que una alimentación saludable beneficia tanto a los individuos como al planeta.
Desde su inicio en 2014, Veganuary ha logrado captar la atención de millones de personas en todo el mundo, convirtiéndose en un fenómeno global con campañas en distintos países. La iniciativa sigue creciendo, inspirando a más individuos a reevaluar sus hábitos de consumo y a considerar opciones más sostenibles.