En un reciente episodio que resalta las tensiones entre la libertad de expresión y las tácticas legales empleadas por grandes corporaciones, el colectivo activista Modest Proposals ha sido objeto de amenazas legales por parte de dos importantes compañías del sector del gas natural licuado, TotalEnergies y Equinor. Este grupo ha emplazado el uso de la sátira y la parodia para denunciar el impacto ambiental y humano de la industria LNG a través de la creación de una empresa ficticia denominada Repaer. Su página web, que irónicamente ofrece «compensaciones vitales» para mitigar las muertes causadas por esta industria, junto con un programa que promueve la donación de plasma de niños a receptores adinerados, ha llamado la atención de las corporaciones mencionadas.
Ante esta crítica satírica, TotalEnergies y Equinor reaccionaron enérgicamente, enviando comunicaciones que amenazaban con procesos legales si no se eliminaban sus nombres y logotipos del sitio web. Esto culminó en la eliminación del sitio de su servidor de alojamiento. No obstante, el colectivo recibió el respaldo de la Electronic Frontier Foundation (EFF), que alegó que el sitio era una forma de activismo no comercial y que la confusión era improbable. La EFF también presentó una contranotificación al proveedor de servicios de alojamiento, exigiendo la restauración del sitio web de Modest Proposals.
Este incidente se enmarca en un patrón más amplio donde la industria energética se vale de herramientas legales para acallar las voces disidentes de activistas ambientales. La EFF ha brindado sistemáticamente apoyo a estos grupos frente a demandas por marcas, que buscan silenciar las críticas bajo el argumento de infracciones de derechos de autor o marcas registradas. Usualmente, la reacción de las empresas ante la presión legal ha sido la retractación de sus amenazas, aunque sin reconocer formalmente el error, dejando a los activistas en un estado de incertidumbre sobre sus derechos.
Finalmente, aunque Modest Proposals logró reubicar su sitio a otro proveedor de alojamiento, este incidente destaca los desafíos que enfrentan los activistas que buscan emplear medios creativos para defender causas sociales, frente a las intimidaciones legales de grandes corporaciones.
