Estamos solo a unos días para dejar el año 2021 y dar la bienvenida al 2022. Y en muchos países ya se preparan para este acontecimiento preparando su casa para ese día. ¿Por qué? Porque llevan a cabo una serie de rituales de limpieza para liberar la casa de las malas energías acumuladas y hacer sitio a las buenas para que puedan entrar fácilmente.
¿Quieres saber qué deberías hacer tú?
Rituales de limpieza: el Oosouji
Vamos a tomar como referencia a Japón, ya que es uno de los países que mejor se prepara para la entrada del nuevo año, no solo con tradiciones en las personas, sino también en las casas. Y, para ello, tienen una celebración el 28 de diciembre a la que llaman Oosouji.
¿En qué consiste? Bueno, si has visto series japonesas (animes, mangas), sabrás que una de las escenas que ocurren cuando se está pasando por la época navideña es una limpieza de la casa. Es algo que siempre pasa, son sus rituales de limpieza de Año Nuevo.
Y en eso consiste, en limpiar a fondo la casa para que esté lo más limpia posible, eliminando todo lo que se haya acumulado. En nuestra forma de entender esa limpieza, sería limpiar de arriba abajo (paredes y techos incluidos) las habitaciones una a una, incluyendo cajones, armarios, etc.
De esta manera ponen orden, eliminan aquello que no sirve o que no es útil y lo sacan para hacer sitio al 2022 y lo que pueda traer.
Para ello, siguen una serie de pasos que son los siguientes:
Saber cuáles van a ser los objetivos
Es decir, escribir en un papel lo que se espera del 2022. Puede parecer una tontería pero esos buenos deseos son los que deben regir la limpieza porque vas a enfocarte en conseguirlos desde la propia casa.
Por ejemplo, si tu objetivo es conseguir un trabajo, los rituales de limpieza se centrarán en tener un espacio donde puedas trabajar de manera adecuada y conseguir focalizar tus esfuerzos en ese objetivo.
Eliminar todo lo viejo e inútil
Y no vale decir, «bueno, lo guardo por si acaso». No es la filosofía. Si no lo has usado en un año, lo único que hace es acumularse, y llenarse de malas vibras, así que lo mejor es sacarlo de casa.
Es algo normal el que tendamos a acumular, aun teniendo una casa pequeña. Pero es importante quitar todo aquello que dejamos, a veces porque nos trae recuerdos, porque no nos acordamos de ello, etc. Si te pasa eso, intenta hacer dos montones, y solo dos: lo que se queda y lo que se va.
Limpia a fondo
Es lo que te decíamos antes de los rituales de limpieza, consiste en una limpieza de arriba abajo, completa, incluyendo esos rincones que no se limpian a menudo o que no solemos prestar atención.
Eso sí, hay que limpiar siempre de lo más arriba (si vives en una casa de varios pisos) a lo más abajo. Y de lo más lejos de la entrada a lo más cerca. ¿Por qué? Pues porque estás echando las malas energías y esas vas llevándolas hasta la puerta de entrada para expulsarlas.
No conviene usar productos químicos, sino que solo con agua, vinagre y bicarbonato tiene lo necesario.
Toda la familia participa en los rituales de limpieza
Y cuando decimos toda, es toda, ancianos y niños incluidos. A partir de los dos años, ya pueden limpiar así que no los excluyas. También ellos han de ser responsables y deben hacer su parte de limpieza (sobre todo porque fomentas su autoestima y también haces que no sean «una carga»).
Otros rituales de limpieza para el 31 de diciembre
Además del ritual Oosouji, hay otros rituales que también se pueden llevar a cabo relacionados con la purificación y limpieza de la casa.
Uno de los rituales de limpieza más llamativos es el ponerte a barrer tu casa desde la parte más lejana de esta hasta la más cercana a la entrada a las 12 de la noche del 31 de diciembre. Es una forma de que, en la entrada del año nuevo, tú ya estés echando todo lo malo.
Y, ¿has visto alguna vez en series o películas que muchos tiran agua en las entradas de las casas? Pues es otro de los rituales de limpieza habituales que se hacen en esa época.
Está relacionado con echar de la casa las penas, los sufrimientos, las lágrimas y todo lo negativo que se ha vivido. Obviamente, es solo una comparación, pero muchas veces ayuda a sentirse mejor y a quitarse un poco de esa mochila que llevamos a los hombros y que, a menudo, cargamos con cosas que hay que dejar atrás.
Como no te cuesta nada, y además es una forma de limpiar tu casa a fondo (sobre todo si lo vas posponiendo a menudo) y de entrar con buen pie en el nuevo año, te recomendamos que lo hagas. Quién sabe, quizá solo con eso haces que sea un poco más afortunado el 2022. ¿Te animarías a probar suerte además de con otros rituales de la Nochevieja?