El día de Navidad, como el día de Reyes, son dos de los más esperados por los más pequeños. Y todo por los regalos de Navidad.
Sin embargo, hay ocasiones en las que se vuelven creativos a la hora de colocar los regalos, y hacen cosas increíbles (que llaman más la atención que los propios regalos). ¿Quieres que demos ideas para colocar los regalos navideños?
Regalos de Navidad: el arte de colocarlos en tu hogar
Sí, Papá Noel y los Reyes Magos a veces tienen un poquito más de tiempo (y de magia) para colocar los regalos que llevan de una manera especial. Hasta ahora, los que más han llamado la atención son los siguientes, así que quizá te los encuentres este año.
1. En los calcetines de Navidad
Son muchos los hogares que hoy día cuelgan los calcetines de Navidad, tengan o no chimenea para ello. Suelen dejarlos en las escaleras, o incluso en la entrada de la casa, usando la percha de los abrigos como colgador improvisado para una decoración navideña.
Por eso, una opción, sobre todo para los regalos más pequeños o aquellos largos, sería la de ponerlos en el calcetín navideño. Además, así sorprendes a los niños, sobre todo si llenas el calcetín de algodón (o un material similar) y escondes dentro esas sorpresas. El simple hecho de tener que buscarlo, ya hace que dé más ilusión cuando se encuentra.
2. Debajo del árbol
Esta es la opción habitual de colocar los regalos de Navidad, dejándolos debajo del árbol. Pero a veces tienes que colocarlos de una forma adecuada para que, cuando se vayan a abrir, no acabe el árbol navideño en el suelo. Así que te recomendamos lo siguiente:
Si tienes muchos regalos, es mejor distribuirlos, colocando los más posibles, no debajo del árbol, sino al lado. Incluso conviene que dejes un hueco preparado para que los niños puedan sentarse y alcanzar regalos.
Si tienes pocos regalos, intenta distribuirlos según para quien sean. Por ejemplo, colocando las zapatillas de estar en casa justo frente al regalo. Seguro que cuando se despierten van a buscar sus zapatillas y al ir a preguntarte, verán dónde están y lo que les espera.
3. Escondidos por la casa (¡a la búsqueda de los regalos de Navidad!)
Pues sí. Porque a veces Papá Noel y los Reyes Magos pueden ser un poco “malos” y esconder por toda la casa los regalos de Navidad. ¿Te imaginas que ese día tengas bajo el árbol un sobre para cada persona donde diga el número de regalos que te ha dejado y que están escondidos por la casa?
Seguro que los niños se lo pasan genial buscando aunque debes considerar esta forma de colocar los regalos si son un poco trastos y no van a tener cuidado después de recoger si ponen las cosas patas arriba.
4. Dentro de cajas más grandes
Como sabes, a los niños les encantan las cosas grandes. No falla ni uno. Siempre quieren el regalo más grande.
A veces, esto no se puede lograr, pero ¿quién dice que no puedas meter los regalos de Navidad en cajas más grandes y simularlo?
Hay que enseñarles desde pequeños que las apariencias engañan y que a veces no lo más grande es lo mejor, sino que las pequeñas cosas también son importantes.
5. Marcando el camino al tesoro de los regalos de Navidad
¿Y si fueran unos Reyes Magos y Papá Noel más divertidos? Imagina que dejan un regalo a los pies de la cama. Y cuando se levantan los niños (después de haber acabado con el envoltorio y saber lo que hay dentro) para correr a enseñártelo, descubren otro regalo. Y varios metros más allá, otro más.
Es como un camino de tesoros, que seguro que los más pequeños quieren seguir sin rechistar. ¿A que sí?
6. Formando un árbol de Navidad por sí solos
Otra opción, que además puede rivalizar con el árbol de Navidad, es que Papá Noel y los Reyes Magos jueguen un poco al Tetris. ¿Por qué? Pues porque les proponemos que cojan todos los regalos de Navidad que dejen y hagan con ellos un árbol navideño al lado del que está decorado.
De esta forma, cuando lo vean, no solo disfrutarán por los regalos que hay, sino también porque parecerá una decoración de árbol de Navidad que llamará la atención por sí solo. ¿Te imaginas la cara de todos cuando vean algo así?
7. Cajas con regalos, y cajas sin ellos
A los niños les gusta la cantidad. Ellos disfrutan mucho levantándose y acercándose a su árbol de Navidad para descubrir cuántos regalos hay. Y algunos son materialistas, así que a esos Papá Noel y los Reyes Magos pueden “castigarlos” llevándoles regalos vacíos.
Por ejemplo, si Papá Noel le lleva dos regalos, en lugar de dos “cajas”, se puede encontrar con diez. Pero solo dos tienen algo. Sí, puede ser frustrante, pero ayudará a los niños a entender que a veces la cantidad no lo es todo, sino la ilusión de recibir algo.